EL
CAñO. Quizá, junto con la
plaza, el lugar más emblemático y querido del
pueblo. Construído en el año 1903 y utilizado a pleno rendimiento hasta mitad de la década de los ochenta, cuando por fin, y pese a la desidia del
Ayuntamiento al cual pertenecía y pertenece el pueblo, se llevó (no sin gran esfuerzo, sudor y dinero) el
agua al interior de las viviendas. Antiguamente fue lugar de encuentro de mozos y mozas casaderas, remanso del
ganado, paz del alma y refresco del cuerpo. Muchas parejas se
... (ver texto completo)