Nuestras vidas no están en manos de los dioses, sino en manos de nuestros cocineros.
Gran distracción deben tener los dioses en el cielo por permitir que un cocinillas se pasee entre los fogones.
Muchas felicidades a toda la organizacion,
Le pregunto Dios al Cocinero, ¿Ke Le dijo el azucar al Café,?
ke amarga seria tu vida sin mi.
Muchas felicidades a toda la organizacion,
Le pregunto Dios al Cocinero, ¿Ke Le dijo el azucar al Café,?
ke amarga seria tu vida sin mi.