TAMARA DE CAMPOS: Yo felicito a quienes tienen la delicadeza de decir,...

Yo felicito a quienes tienen la delicadeza de decir, aunque sea unas breves palabras, a cualquiera de los pocos asistentes a los foros de los pueblos, cualquiera que sea su origen o residencia. Que pena que disponiendo de un medio como este, no proliferen mas las comunicaciones entre las personas que recuerdan tantos sitios y tantas bellezas como esta del órgano de Tamara. En mi pueblo había también un órgano pero como no estaba puesto a punto, un cura trabuca iré lo desmonto, vendió los tubos y el resto fue destruido. Un verdadero sacrilegio, impune. Así es nuestro país, esta España descreída y desinteresada por lo que no tenga un interés crematística inmediato. O por lo menos, una parte de nuestro paí