Club Peña Torquilla
Pasión por el mundo natural
El Club de Montaña Peña Torquilla de Guardo cuenta actualmente con 100 socios
DPSANDRA MACHO
Los aficionados a la montaña y a practicar los deportes que en ella se pueden desarrollar como el alpinismo, escalada, rappel, senderismo y marchas nocturnas, entre muchas otras actividades, tienen un punto de encuentro en el municipio guardense para compartir sus experiencias y aficiones con otros amantes de la montaña.
El Club Peña Torquilla de Guardo, que cuenta en la actualidad con 100 socios, nació hace ocho años cuando dos aficionados a la montaña decidieron convocar a un grupo de amigos en una cafetería. Gracias, en buena parte a estos, se consiguió formar un grupo sólido que se consolidó en el club que es ahora.
Cada miércoles, los integrantes de este colectivo se reúnen en su sede, que se ubica en la calle Las Vegas, para conversar y planificar las rutas que se van a realizar en el fin de semana siguiente y para hacer los carteles correspondientes.
A lo largo del presente año han sido numerosas las salidas que han realizado tanto los socios como personas no socias del club. Entre éstas se incluyen las marchas a la Cueva de Tibigracias, Sierra de Peñalabra, El Cares, Monte Bernorio, a las Lagunas de Fuentes Carrionas y una ruta nocturna a La Berrea.
«Existe mucha afición a la montaña entre los vecinos guardenses. Además de las personas que vienen con nosotros en las rutas que programamos, también hay otros que deciden ir por su cuenta», explica José Antonio Bardasco, vicepresidente del club.
En la reunión que se llevó a cabo el pasado miércoles se fijaron algunas de las salidas que se realizarán en el próximo año. Una de las novedades que han introducido son las rutas alternativas, es decir, que en cada salida habrá una ruta más sencilla y otra algo más difícil.
Asimismo, una de las costumbres que tienen en el club es dejar tarjetas de presentación en los picos a los que van. Bien la depositan en el buzón que suele haber junto al vértice geodésico, en una cruz de hierro o entre un montón de piedras dentro de un recipiente con el fin de que aquellos que no hayan oído hablar de esta asociación tengan conocimiento de ella.
Pasión por el mundo natural
El Club de Montaña Peña Torquilla de Guardo cuenta actualmente con 100 socios
DPSANDRA MACHO
Los aficionados a la montaña y a practicar los deportes que en ella se pueden desarrollar como el alpinismo, escalada, rappel, senderismo y marchas nocturnas, entre muchas otras actividades, tienen un punto de encuentro en el municipio guardense para compartir sus experiencias y aficiones con otros amantes de la montaña.
El Club Peña Torquilla de Guardo, que cuenta en la actualidad con 100 socios, nació hace ocho años cuando dos aficionados a la montaña decidieron convocar a un grupo de amigos en una cafetería. Gracias, en buena parte a estos, se consiguió formar un grupo sólido que se consolidó en el club que es ahora.
Cada miércoles, los integrantes de este colectivo se reúnen en su sede, que se ubica en la calle Las Vegas, para conversar y planificar las rutas que se van a realizar en el fin de semana siguiente y para hacer los carteles correspondientes.
A lo largo del presente año han sido numerosas las salidas que han realizado tanto los socios como personas no socias del club. Entre éstas se incluyen las marchas a la Cueva de Tibigracias, Sierra de Peñalabra, El Cares, Monte Bernorio, a las Lagunas de Fuentes Carrionas y una ruta nocturna a La Berrea.
«Existe mucha afición a la montaña entre los vecinos guardenses. Además de las personas que vienen con nosotros en las rutas que programamos, también hay otros que deciden ir por su cuenta», explica José Antonio Bardasco, vicepresidente del club.
En la reunión que se llevó a cabo el pasado miércoles se fijaron algunas de las salidas que se realizarán en el próximo año. Una de las novedades que han introducido son las rutas alternativas, es decir, que en cada salida habrá una ruta más sencilla y otra algo más difícil.
Asimismo, una de las costumbres que tienen en el club es dejar tarjetas de presentación en los picos a los que van. Bien la depositan en el buzón que suele haber junto al vértice geodésico, en una cruz de hierro o entre un montón de piedras dentro de un recipiente con el fin de que aquellos que no hayan oído hablar de esta asociación tengan conocimiento de ella.