Veo este punto y me emociono. Hace cincuenta años aquí pululaban las truchas en busca de
comida, pequeñas y principalmente medianas, pero bullían por todas partes. Saltos, boqueos, vida. Aquí he visto musarañas infinidad de veces... Ahora silencio total, nada, nada... no veo siquiera efémeras...