Hola, Alarido.
¿De quién eres nieto/a? Es muy probable que conozca a tu abuela, porque acostumbraba a pasar parte del verano con la mía en Alar y eran famosas las partidas de cartas que jugaba con sus amigas. Aquello eran timbas serias, ríete tú de los casinos de ahora.
Gracias a ellas aprendí a jugar a la brisca y al chinchón. Al julepe no, porque a eso habían jugado antes, cuando eran más, especialmente cuando vivían los maridos.
Un saludo.
Hola Pilar.
Me alegro de que te guste la foto.
Recuerdo como mi abuela iba todas las tardes que podía a casa de tu abuela a jugarse una peseta al chinchón. El día que regresaba con la peseta era la mujer más feliz del mundo.
Un saludo.
Ten por seguro que se lo diré. Gracias por la información.
La foto se debió de tomar al final dela representaciòn del cuento Caperucita Roja, en la segunda mitad de los 50. Tratàndose de un cuento todos los actores eran muy jòvenes, niños y adolescentes y Paquita fuè la encargada de que aquel cuento tuviera un final feliz. No fuè fàcil manejar a aquella chavalerìa pero ella lo consiguiò y la obra se estrenò con gran èxito.
Serìa muy ingrata si no recordara tambièn a Cari Palacios que preparò a un grupo de niñas vestidas de hadas que bailaron un "minuè"...
Hola, L. G. C. He entrado en el blog que me has indicado y la he visto. Está guapísima y super alta, como es ella. Si quieres, cuando tengas un momento, me cuentas la historia de la foto, porque no la sé y debe ser divertida.
Por cierto, no conocía el blog y lo he disfrutado de lo lindo. Mirando, mirando y como ya nada me asombra, me ha parecido ver, o quizás es sólo una ilusión mía, en las fotos nºs. 730968 y 730972 a mi abuelo Francisco Valencia, y a una de mis tías, pero no sé muy bien si sería...
¿De quién eres nieto/a? Es muy probable que conozca a tu abuela, porque acostumbraba a pasar parte del verano con la mía en Alar y eran famosas las partidas de cartas que jugaba con sus amigas. Aquello eran timbas serias, ríete tú de los casinos de ahora.
Gracias a ellas aprendí a jugar a la brisca y al chinchón. Al julepe no, porque a eso habían jugado antes, cuando eran más, especialmente cuando vivían los maridos.
Un saludo.
Hola Pilar.
Me alegro de que te guste la foto.
Recuerdo como mi abuela iba todas las tardes que podía a casa de tu abuela a jugarse una peseta al chinchón. El día que regresaba con la peseta era la mujer más feliz del mundo.
Un saludo.
Ten por seguro que se lo diré. Gracias por la información.
La foto se debió de tomar al final dela representaciòn del cuento Caperucita Roja, en la segunda mitad de los 50. Tratàndose de un cuento todos los actores eran muy jòvenes, niños y adolescentes y Paquita fuè la encargada de que aquel cuento tuviera un final feliz. No fuè fàcil manejar a aquella chavalerìa pero ella lo consiguiò y la obra se estrenò con gran èxito.
Serìa muy ingrata si no recordara tambièn a Cari Palacios que preparò a un grupo de niñas vestidas de hadas que bailaron un "minuè"...
Hola, L. G. C. He entrado en el blog que me has indicado y la he visto. Está guapísima y super alta, como es ella. Si quieres, cuando tengas un momento, me cuentas la historia de la foto, porque no la sé y debe ser divertida.
Por cierto, no conocía el blog y lo he disfrutado de lo lindo. Mirando, mirando y como ya nada me asombra, me ha parecido ver, o quizás es sólo una ilusión mía, en las fotos nºs. 730968 y 730972 a mi abuelo Francisco Valencia, y a una de mis tías, pero no sé muy bien si sería...