Ana, me alegra leer tu mensaje. Yo soy de la generación de tu mamá, hijo de Lorenzo y Secundila, de la plaza de abajo, frente a la iglesia. Tal vez te vi por Villeza o en casa de tus abuelos en Madrid... Vale la pena darse una vuelta de vez en cuando por el pueblín aunque haya poca gente. Hay pocos que hayan sido tan acogedores como el nuestro ¿no lo crees? Saludos, José María.
Hola José María! No te recuerdo, lo siento, pero le preguntaré a mi madre, seguro que ella me sabe orientar algo mejor. El verano pasado pasé por el pueblo, un día solo, pero mejor que nada... a ver a Anita, la prima de mi madre, hija de Fabián, y a su hija Ana Mari. Encontré al pueblo muy cambiado, pero el olor... era el mismo de siempre, a campo, a cereales, a tierra! Ese recuerdo no me lo quita nadie! Y estaban trabajando en la era! Toda una experiencia para mis hijas también, y recuerdos entranables para mí. Por supuesto que Villeza ha sido siempre acogedora.
Villeza acogedora: recuerdo cuando nos juntábamos "demasiados" en la casita de mis abuelos, que nos mandaban a algunos a dormir a casa de alguna prima, y nos acogían con todo carinyo! O ir a comer a casa del tío Eutimio o del tío Fabián, sin avisar ni nada, llamaban a sus nietos a comer y nos decían a los que estuviéramos por allí: y vosotros venid también! Que Dios los tenga en su gracia!
Un saludo entranable desde muy lejos en el mapa, pero cerca en el corazón.
Ana
Un saludo entranable desde muy lejos en el mapa, pero cerca en el corazón.
Ana