Vista general con la Aguilera y el Forao, VIADANGOS DE ARBAS

La lente te captó desde la Vega, - y en ascensión de sierros y escarpadas, - llegó hasta tus cimeras empinadas, - a donde el hombre rara vez se allega.
Desde tu cima, altiva y estratega, - yo miré las campiñas dilatadas - a través de los valles y quebradas - que a nuestra vista el panorama entrega.
Tú eres en grandeza y elegancia, - atalaya avizor de la distancia - que más te azulas, cuanto más te elevas.
Tu nombre, ya imperial, desprecia rangos, - pues siendo la Aguilera de Viadangos - ¡la gloria en serlo, eternamente llevas! CÁNDIDO GARCÍA