La plaza desencatada y nevada. Y digo desencantada por que en los viejos tiempos sólo cantos albergaba, al cambiar su fisonomía la han vuelto mas hermosa.
Tella ha terminado sus vacaciones, en esa casa que hace esquina, la de Vicente y Tella; ahora ya descansan de tantos afanes para esperar a los hijos y ahora a los nietos. Me he alegrado de leer el escrito de Tinin, lamentablemente las defunciones son las noticias que nos suelen dar a los que estamos lejos; mis padres me comentaban conmocionados como había sido. Siento su fallecimiento y rezo para que goce de la paz eterna, donde se habrá encontrado con los que le precedieron.
No os podeis imaginar lo que supone para mí ver esta foto...la "puerta de Margarita", !mi "tía" Margarita!! Y al lado la que fué casa de mis abuelos! Seguro que mis primas, Angelines, María y Marga leen mi mensaje en esta página. Soy Sole (de Pamplona), la hija de Caya. Ya no queda en el mundo gente como aquella, verdad?
Buenos momentos con las facundo o la praviana, inolvidables, felices fiestas.
La cantidad de tardes que pasamos cascando pipas en la puerta de Margarita. A que no lo habeìs olvidado? Y después a las bodegas a seguir charlando, los del pueblo y los que veraneabamos.
Tella ha terminado sus vacaciones, en esa casa que hace esquina, la de Vicente y Tella; ahora ya descansan de tantos afanes para esperar a los hijos y ahora a los nietos. Me he alegrado de leer el escrito de Tinin, lamentablemente las defunciones son las noticias que nos suelen dar a los que estamos lejos; mis padres me comentaban conmocionados como había sido. Siento su fallecimiento y rezo para que goce de la paz eterna, donde se habrá encontrado con los que le precedieron.
No os podeis imaginar lo que supone para mí ver esta foto...la "puerta de Margarita", !mi "tía" Margarita!! Y al lado la que fué casa de mis abuelos! Seguro que mis primas, Angelines, María y Marga leen mi mensaje en esta página. Soy Sole (de Pamplona), la hija de Caya. Ya no queda en el mundo gente como aquella, verdad?
Buenos momentos con las facundo o la praviana, inolvidables, felices fiestas.
La cantidad de tardes que pasamos cascando pipas en la puerta de Margarita. A que no lo habeìs olvidado? Y después a las bodegas a seguir charlando, los del pueblo y los que veraneabamos.