Los encerrados en el Pozo Calderón [editar]
Visto la dureza de los enfrentamientos, y después de varias reuniones, los dirigentes sindicales locales deciden encerrarse en el Pozo Calderón como una nueva medida de presión para la Administración. Los encerrados eran: Luciano Leiguarda, Guillermo Murias, Adolfo Bernardo, José Manuel Bruzos, Manuel Lastra, Alfredo García, Enrique Pancorvo y José Luis Lago. Desde allí, a 400m de profundidad en uno de los talleres del Pozo Calderón, los dirigentes sindicales apoyan las medidas que sus compañeros realizan en la superficie. Así permanecerán 50 días, en uno de los encierros más largos del sindicalismo, en condiciones durísimas de humedad, ruido, ausencia de luz,... Sus compañeros se ocuparán del suministro de alimentos y de darles ánimos constantemente.
Mientras, continúan las movilizaciones, con cortes de carretera y manifestaciones. Pero se gesta entre los sindicatos una nueva acción pacífica que pasará a la Historia del Sindicalismo español: la Marcha Negra.
Visto la dureza de los enfrentamientos, y después de varias reuniones, los dirigentes sindicales locales deciden encerrarse en el Pozo Calderón como una nueva medida de presión para la Administración. Los encerrados eran: Luciano Leiguarda, Guillermo Murias, Adolfo Bernardo, José Manuel Bruzos, Manuel Lastra, Alfredo García, Enrique Pancorvo y José Luis Lago. Desde allí, a 400m de profundidad en uno de los talleres del Pozo Calderón, los dirigentes sindicales apoyan las medidas que sus compañeros realizan en la superficie. Así permanecerán 50 días, en uno de los encierros más largos del sindicalismo, en condiciones durísimas de humedad, ruido, ausencia de luz,... Sus compañeros se ocuparán del suministro de alimentos y de darles ánimos constantemente.
Mientras, continúan las movilizaciones, con cortes de carretera y manifestaciones. Pero se gesta entre los sindicatos una nueva acción pacífica que pasará a la Historia del Sindicalismo español: la Marcha Negra.