Un rebaño de ovejas y cabras recorre los montes de nuestra montaña denunciando que los leoneses nos estamos comportando como las ovejas, que escondemos la cabeza y no hay ‘ningún cabra’ orgulloso que la levante desafiante para preguntar ‘‘ ¿qué nos estáis haciendo?’’.
Dicen que los bosques se queman porque nadie pace el monte bajo que así se convierte en yesca que arde ante cualquier chispa y arrasa todo lo que pilla por delante.
Dicen que traemos de cualquier lugar la leche y el queso mientras sólo le ponen trabas a quien lo quiere hacer en casa.
Dicen que hemos perdido las cañadas, las veredas, los cordeles y la rica historia, tradiciones y trabajos que formaban parte de esta vieja cultura que fue la nuestra y ya no lo es.
Ángel, un pastor del Esla, se pregunta con mucha ingenuidad: ‘‘ ¿Cómo me piden tener más ovejas y después subvencionan que en los pastos se planten chopos?’’. En ninguna ventanilla le han respondido.
Como nadie respondió a La Bullonera cuando hace 30 años cantaba aquello de ‘‘acabaron con el agua, se llevaron el carbón, ya sólo eso les falta robarnos la población’’.
Ya nos la han robado.
Dicen que los bosques se queman porque nadie pace el monte bajo que así se convierte en yesca que arde ante cualquier chispa y arrasa todo lo que pilla por delante.
Dicen que traemos de cualquier lugar la leche y el queso mientras sólo le ponen trabas a quien lo quiere hacer en casa.
Dicen que hemos perdido las cañadas, las veredas, los cordeles y la rica historia, tradiciones y trabajos que formaban parte de esta vieja cultura que fue la nuestra y ya no lo es.
Ángel, un pastor del Esla, se pregunta con mucha ingenuidad: ‘‘ ¿Cómo me piden tener más ovejas y después subvencionan que en los pastos se planten chopos?’’. En ninguna ventanilla le han respondido.
Como nadie respondió a La Bullonera cuando hace 30 años cantaba aquello de ‘‘acabaron con el agua, se llevaron el carbón, ya sólo eso les falta robarnos la población’’.
Ya nos la han robado.