El gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero presentó el pasado 28 de julio de 2006 la conocida como Ley de Memoria Histórica.
Previamente se había creado una Comisión Interministerial para el Estudio de las Víctimas de la Guerra civil y la dictadura franquista, que en los últimos meses de 2004 y los primeros de 2005 se reunió con cerca de 50 colectivos ciudadanos, incluida la Falange, para conocer las demandas que las distintas asociaciones hacían a la citada Comisión.
Finalmente, el proyecto de ley no ha atendido a ninguna demanda de esas asociaciones, elaborando una propuesta que parece una repetición de los acuerdos que se tomaron en la Transición, hecha a la medida de unas expectativas electorales y no con la vocación de dar justicia a los hombres y las mujeres que construyeron nuestra primera democracia y que la defendieron de forma ejemplar, muchas veces con sus vidas, con años de cárcel, exilio, miseria y represión.
Previamente se había creado una Comisión Interministerial para el Estudio de las Víctimas de la Guerra civil y la dictadura franquista, que en los últimos meses de 2004 y los primeros de 2005 se reunió con cerca de 50 colectivos ciudadanos, incluida la Falange, para conocer las demandas que las distintas asociaciones hacían a la citada Comisión.
Finalmente, el proyecto de ley no ha atendido a ninguna demanda de esas asociaciones, elaborando una propuesta que parece una repetición de los acuerdos que se tomaron en la Transición, hecha a la medida de unas expectativas electorales y no con la vocación de dar justicia a los hombres y las mujeres que construyeron nuestra primera democracia y que la defendieron de forma ejemplar, muchas veces con sus vidas, con años de cárcel, exilio, miseria y represión.