Actualidad:
Susana Vergara Pedreira león
El Baloncesto León se abre paso lentamente en su ingreso en la élite. Está despejada ya la duda del entrenador: Aranzana se queda. Y casi despejada la del presidente del club: Emilio Fernández, responsable de Unicef a nivel regional y provincial, tomará las riendas en los próximos días si no hay contratiempo político. Pero el club tiene aún aspectos clave que solucionar.
El Baloncesto León necesita duplicar al menos su actual presupuesto para manejarse entre los grandes del baloncesto nacional, la categoría a la que pertenece desde el 26 de mayo, fecha en la que derrotó al CAI Zaragoza en el quinto partido de un reñido play off. El equipo manejaba hasta ahora un presupuesto cercano a los 2 millones de euros (332 millones de pesetas), insuficiente para estar en la ACB. El motivo: que la Asociación de Clubes de Baloncesto exige a los equipos que están en su liga disponer al menos de 3, 3 millones de euros anuales (549 millones de pesetas). Pero con esa cifra sería prácticamente imposible mantener un equipo para estar al nivel de los que van a ser sus competidores. Por eso, el equipo técnico del club habla de duplicar el presupuesto actual.
El presupuesto del Baloncesto León se decidirá en un consejo de administración que está aún por convocar y tendrá que ser acordada por los dos socios del club: el Ayuntamiento de León (que tiene el 51% de las acciones) y Agelco (que posee el 49%). Tanto el equipo de Gobierno municipal como la agrupación de empresarios ha establecido ya contactos en busca de un patrocinador. Hasta ahora, el León cuenta con el patrocinio de la empresa leonesa Climalia.
«Somos realistas. Nos gustaría tener 17 millones de euros, como alguno de los clubes de la ACB pero nos conformamos con el dobre de oo que hay ahora», dice divertido incluso el gerente del club, Joaquín Rodríguez.
Rodríguez es experto en hacer equipos campeones con un presupuesto mínimo pero no en hacer milagros. Tener un equipo competitivo era una de las condiciones que puso Gustavo Aranzana para quedarse. El nuevo equipo de Gobierno, dirigido por el alcalde, el socialista Paco Fernández, ha garantizado la paz en el club, el consenso y la modernización de la entidad.
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Susana Vergara Pedreira león
El Baloncesto León se abre paso lentamente en su ingreso en la élite. Está despejada ya la duda del entrenador: Aranzana se queda. Y casi despejada la del presidente del club: Emilio Fernández, responsable de Unicef a nivel regional y provincial, tomará las riendas en los próximos días si no hay contratiempo político. Pero el club tiene aún aspectos clave que solucionar.
El Baloncesto León necesita duplicar al menos su actual presupuesto para manejarse entre los grandes del baloncesto nacional, la categoría a la que pertenece desde el 26 de mayo, fecha en la que derrotó al CAI Zaragoza en el quinto partido de un reñido play off. El equipo manejaba hasta ahora un presupuesto cercano a los 2 millones de euros (332 millones de pesetas), insuficiente para estar en la ACB. El motivo: que la Asociación de Clubes de Baloncesto exige a los equipos que están en su liga disponer al menos de 3, 3 millones de euros anuales (549 millones de pesetas). Pero con esa cifra sería prácticamente imposible mantener un equipo para estar al nivel de los que van a ser sus competidores. Por eso, el equipo técnico del club habla de duplicar el presupuesto actual.
El presupuesto del Baloncesto León se decidirá en un consejo de administración que está aún por convocar y tendrá que ser acordada por los dos socios del club: el Ayuntamiento de León (que tiene el 51% de las acciones) y Agelco (que posee el 49%). Tanto el equipo de Gobierno municipal como la agrupación de empresarios ha establecido ya contactos en busca de un patrocinador. Hasta ahora, el León cuenta con el patrocinio de la empresa leonesa Climalia.
«Somos realistas. Nos gustaría tener 17 millones de euros, como alguno de los clubes de la ACB pero nos conformamos con el dobre de oo que hay ahora», dice divertido incluso el gerente del club, Joaquín Rodríguez.
Rodríguez es experto en hacer equipos campeones con un presupuesto mínimo pero no en hacer milagros. Tener un equipo competitivo era una de las condiciones que puso Gustavo Aranzana para quedarse. El nuevo equipo de Gobierno, dirigido por el alcalde, el socialista Paco Fernández, ha garantizado la paz en el club, el consenso y la modernización de la entidad.
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