Los escudos nobiliarios
y los techados de paja
conviven en nuestros pueblos
con las torres de espadaña.
La rica habla omañesa
es una delicia oír,
con ella los omañeses
han contado su vivir.
Por su flora y por su fauna,
por el respeto a la tierra,
Omaña ha sido nombrada
Reserva de la Biosfera.
Su primavera es olorosa,
sonora y multicolor,
sus galanas y sus piornos,
tiñen los montes de flor.
Narcisos y margaritas,
asoman entre la yerba,
por entre ellos se pasea,
majestuosa, la cigüeña.
El río corre abundante,
los prados están viciosos,
por las vallinas descienden
los arroyos caudalosos.
y los techados de paja
conviven en nuestros pueblos
con las torres de espadaña.
La rica habla omañesa
es una delicia oír,
con ella los omañeses
han contado su vivir.
Por su flora y por su fauna,
por el respeto a la tierra,
Omaña ha sido nombrada
Reserva de la Biosfera.
Su primavera es olorosa,
sonora y multicolor,
sus galanas y sus piornos,
tiñen los montes de flor.
Narcisos y margaritas,
asoman entre la yerba,
por entre ellos se pasea,
majestuosa, la cigüeña.
El río corre abundante,
los prados están viciosos,
por las vallinas descienden
los arroyos caudalosos.