El Couso está en estos momentos de un
color morado como nunca producto de las
flores de las urces. Creo que este año los efectos del fuego, de hace dos
veranos, habrán quedado difuminados. ¡Esta
naturaleza nuestra ...!. Por cierto, creo que los
árboles que los expertos y las subvenciones plantaron en este
monte van a ser ahogados por las urces, plantas autóctonas y adaptadas a ese monte en concreto. Aviso a biólogos y ecologistas.