Nos pidieron opinión a los vecinos, que si teníamos fotos, que las aportásemos, con el fin de restaurar de la manera más fiable posible. Y como la fuente es de piedra, pusieron los bancos de la misma manera y la obra de la pavimentación quedó hasta que la Junta fuera a dar una nueva subvención. Habría que saber qué gana el técnico y otros con desmantelarnos la plaza, una plaza única, redonda y que la vamos a echar de menos si hacen esta locura sin pies ni cabeza. Adoquines, cemento y hormigón, acorde con sus cabezas cuadradas. Y luego que les digo lo que pienso y n no les gusta ni un pelo. Y es lo único que puedo hacer ante tanta incongruencia. Las palabras no destrozan, son palabras y si encima de hacer estas barrabasadas nos tenemos que callar, andarían algunos bien cumplidos. Cosa que no se les va a conseguir.
Porque encima en otra conversación con el técnico, toda vez que el alcalde decía en los plenos que él no tenía nada que ver, que era el técnico quien decía que tenía que hacer, etc., fui a hablar con él, claro está, con el que puede saber y hace los planes, que con gente que nada sabe de nada ya es paso de preguntar nada. Como decía, el técnico me dijo que nadie dijo nada de la obra de la carretera. Pero si nos ocultan la información cómo íbamos a saber qué harían. Y supimos después que ni el proyecto se respetó. Así que algunos saldrán bien definidos con este tipo de actuaciones. Si le dije que para la plaza no iba a ser igual, y lo estoy cumpliendo y aún no he acabado de decir todo lo que pienso hacer y escribir al respecto. Después que cometan esa barbaridad por lo menos que no tengan la desfachatez de decir que la culpa, nosotros, que nos callamos.
Por cierto que poco solucionaríamos pero el abogado, otro técnico más que aquí manda, ya dijo justo lo contrario. Que él no era quien mandaba en la decisión tomada, que fue el alcalde, qué él como abogado fue un mero vehículo nada más. Si aconsejó, el alcalde fue quien tuvo la voz cantante de decidir. ¡Qué bonito es mentir por mentir, cuando habrá que esperar el turno de que llegue en bandeja la verdad. Y servida en bandeja de plata. ¿Que no le puedo decir yo al alcalde lo mucho y lo mal que miente? Pues se lo digo porque es verdad.
Porque encima en otra conversación con el técnico, toda vez que el alcalde decía en los plenos que él no tenía nada que ver, que era el técnico quien decía que tenía que hacer, etc., fui a hablar con él, claro está, con el que puede saber y hace los planes, que con gente que nada sabe de nada ya es paso de preguntar nada. Como decía, el técnico me dijo que nadie dijo nada de la obra de la carretera. Pero si nos ocultan la información cómo íbamos a saber qué harían. Y supimos después que ni el proyecto se respetó. Así que algunos saldrán bien definidos con este tipo de actuaciones. Si le dije que para la plaza no iba a ser igual, y lo estoy cumpliendo y aún no he acabado de decir todo lo que pienso hacer y escribir al respecto. Después que cometan esa barbaridad por lo menos que no tengan la desfachatez de decir que la culpa, nosotros, que nos callamos.
Por cierto que poco solucionaríamos pero el abogado, otro técnico más que aquí manda, ya dijo justo lo contrario. Que él no era quien mandaba en la decisión tomada, que fue el alcalde, qué él como abogado fue un mero vehículo nada más. Si aconsejó, el alcalde fue quien tuvo la voz cantante de decidir. ¡Qué bonito es mentir por mentir, cuando habrá que esperar el turno de que llegue en bandeja la verdad. Y servida en bandeja de plata. ¿Que no le puedo decir yo al alcalde lo mucho y lo mal que miente? Pues se lo digo porque es verdad.
