MAYCA EN EL CORAZÓN
II
No quise que llegara el momento
de guardarnos tus bellos sentimientos
con ropas de palabras y de tinta.
¡No quise que llegara este momento!
Albergaba la esperanza en lo incierto.
¡Larga espera.. tu vida, en punto cero!
Asoladas violetas, pensamientos,
hiedras, rosas, claveles y geranios.
¡Ya están floridos tus morados lirios!
Dispuestos en hilera, y bien lozanos.
Tus flores cultivadas, nuestra herencia,
que lucen con mimo y cuidado riego
de una jardinera que deja flores,
afligidas, llorosas; pero bellas,
y gotas de rocío en sus corolas.
¡Qué solos, Mayca, nos dejas en medio
de esta cruel, rota y fría primavera,
que arpía nos priva de tu presencia
y clara voz de fuente cristalina
para vivir a la sombra de tu alma.
Carmen García
II
No quise que llegara el momento
de guardarnos tus bellos sentimientos
con ropas de palabras y de tinta.
¡No quise que llegara este momento!
Albergaba la esperanza en lo incierto.
¡Larga espera.. tu vida, en punto cero!
Asoladas violetas, pensamientos,
hiedras, rosas, claveles y geranios.
¡Ya están floridos tus morados lirios!
Dispuestos en hilera, y bien lozanos.
Tus flores cultivadas, nuestra herencia,
que lucen con mimo y cuidado riego
de una jardinera que deja flores,
afligidas, llorosas; pero bellas,
y gotas de rocío en sus corolas.
¡Qué solos, Mayca, nos dejas en medio
de esta cruel, rota y fría primavera,
que arpía nos priva de tu presencia
y clara voz de fuente cristalina
para vivir a la sombra de tu alma.
Carmen García