Compramos energía a futuro

TARDAJOS: Buenas noches Ana María: ...

-Está bien. Así lo haré.

Y desde aquella noche, hay dos nuevas estrellas que lucen muy juntas y a quienes llaman Lebreles, pues se convirtieron en fieles compañeros el uno del otro.

Fue el anciano encarcelado quien se encargó de que todo el mundo supiera de la inocencia del pastor y de los celos de la Luna. Por eso, en la estepa castellana, cuando la Luna no se deja ver, los hombres temen por sus mujeres.

FIN DE LA LEYENDA: LOS CELOS DE LA LUNA

Buenas noches Carmen, me asomo a la ventanilla de Tardajos para ver el final del cuento, sabía por ti que no era tuyo pero yo no lo conocía, es muy bonito, lo de los tremendos celos.... es una tragedia casi siempre, amores desmedidos... no sé.
Sigo con las canciones de las corales por Internet, ya no sé cual me gusta más.
Es mi deseo que pases unas estupendas fiestas de Navidad y desearle a todo el mundo un BUEN AÑO NUEVO,
Un fuerte abrazo.

Buenas noches Ana María:
Me alegro que te haya gustado la historia leyenda. Como ves ponemos nuestros defectos a los astros, cuando los celosos somos los humanos. En la historia de la literatura, a la luna se le atribuyen acciones perversas, quizás para disfrazar las nuestras.
Los humanos actúan por la influencia de la luna y cometen atrocidades. Muchos han sido los autores que le han atribuido tales poderes.

A mi la luna no me inspira esos malos hados. Veo en ella un ser luminoso que aclara las sendas por la noche. Influye en las mareas y en las cosechas. En fin, un ser benefactor para los humanos. Siento la luna amiga. Y así la sentí un día en que se me ocurrió una historia de enamorados de la Luna, allá por los años 80 en que no sabía, ni tenía ni idea de estos lugares. Todavía me acuerdo de lo bien que me lo pasé escribiendo esta historia.
Muchas gracias por tus buenos deseos y lo mismo te digo, que todos tus sueños se cumplan.
Un fuerte abrazo y te cuento en verso la historia de la Luna, que ésta si es obra mía.