Ya que (se me disparó de nuevo el post), he dado esta mañana revisando mis artículos con uno relacionado con las infraestructuras.
Os diré, que yo, estaba en las dependencias municipales en plan de colaborar administrativamente; y una factura me alertó para percatarme que se estaba pagando una factura del pasado, por una obra que no se hizo bien.
A algunos, esta intromisión les supo a cuerno quemado, pero no me dijeron nada. Ya harían lo que creyesen conveniente ante mi "rebeldía" de informar, informar e informar. ¡Dios que manía la mía!
No sé cuando me contagié, no lo sé, pero una vez con el contagio, una no podía ya actuar de otro modo. Porque la situación todavía daba esa oportunidad.
Me siento fenomenal por haber tenido una oportunidad, y haberla aprovechado en favor del pueblo.
Much@s no hubieran sabido ni podido hacerlo, pero dominar el lenguaje, tener una reputación ganada de muchos años, no era para tirarla por la borda. Y para mi, la información y la comunicación siempre fue lo más importante.
Que archivar, colocar papeles, ordenar también lo fue; pero una vocación nacida por la vocación de ser fiel a un pueblo, no se podía perder y no lo hice. Y después, pensé, que pase lo que tenga que pasar. Que yo no voy a pasar de un asunto, del cual hice artículo dando a conocer un proyecto de un nuevo depósito en la ladera del Castro tardajeño.
Quizá a la tarde lo cuelgue que ahora voy a colgar mi ropa para que se seque al sol.
Saludos cordiales
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