Tuve el privilegio de nacer en esa villa. Los avatares de la vida me llevaron por el mundo, pero cada vez que la vuelvo a visitar, vuelvo a mi niñez, a
las eras en
verano y al hogar en
invierno. Cada vez que vuelvo, no me interesan las nuevas barriadas, solo las antíguas casonas, los
campos, la
torre, la
casa de los monteros en fin lo que me vuelve a mi niñez y al principio de la villa. Tampoco me dejo de extasiar con todo lo que se ha dado en llamar " los pasiegos" !Que maravilla!. Uno ha escrito,
... (ver texto completo)