Arroyo, aguas que irán al rio Ebro, MUNDOVAL

MUDOVAL
Mudóval es un lugar despoblado y apartado, uno más de los muchos pueblos abandonados que existen en la provincia de Burgos y en especial en esta zona del valle de Manzanedo, situado en los altos del valle, cercano a la carretera que sube de Manzanedo, capital del valle, a Villasopliz.
Mudóval perteneció al alfoz de Arreba y más tarde dentro de la merindad de Castilla la Vieja estando vinculado al abad cisterciense de Rioseco.
El nombre de “Mudovar” aparece escrito por primera vez en el cartulario del monasterio cisterciense de Santa María de Rioseco, en una donación que se hizo en el año de 1342.
Mudóval al igual que los demás pueblos que formaban el valle de Manzanedo, tenía jurisdicción de realengo, es decir, pertenecía al rey a quien pagaban los Derechos Reales.
Actualmente apenas quedan las ruinas de algunos edificios en pie, abandonados y envueltos por la maleza, destaca la torre de la iglesia que estuvo dedicada a Nuestra Señora de la Asunción. El templo semiderruido y abandonado era principalmente de estilo románico que pudiera datarse en la segunda mitad del siglo XII. De una nave con ábside semicircular y parte de la torre a los pies. Los únicos restos escultóricos conservados están en los canecillos de la cabecera, capiteles con decoración vegetal y ventana románica sencilla.
Mudóval es un pueblo apartado rodeado de robles y encinas, donde el ganado pasta libremente por la zona.