¡Muy buenas estas letrillas, Antonio! Nadia fue al Colegio Ma. Auxiliadora y yo notè que algunas madres, sobre todo, competìan a ver quièn tenìa el mejor vestido, o la mejor fiesta, o estampas màs sofisticadas. Todo quedaba en lo material, perdièndose el verdadero sentido de la Comuniòn. Y luego, esas familias ya no asistìan màs a misa, porque ese sacramento era obligatorio. Lo de Nadia fue todo sencillo, muy emotivo y espiritual. En sus estampas decìa:"Hoy Jesùs besò mi alma y me alimentò con su amor porque recibì la Primera Comuniòn". ¡Un abrazo!