CARTA DE UN ANCIANO
Muy fino amigo:
Principio las líneas de esta misiva
para agradecerle su visita... recibimos
tan pocas!... pero en fin, no debo
quejarme, antes bien agradezco a Dios
por tantos y tantos años de vida que me
ha otorgado. Cumplí ya seis años en este
asilo donde por mi propia
voluntad me he confinado.
He conocido en esta larga estancia a
muchos viejos y muchas ancianitas y aunque
sabemos que nuestra estancia
en este mundo es ya corta,
eso no ha impedido que hayamos
llegado a estimarnos y extrañar
a los que se van yendo;
el día que hay una defunción... se
respira aquí un silencio impresionante.
Mi estancia en el mundo exterior era ya
insostenible; creo que fue un error el
haber invitado a mi hijo y su familia
a vivir en mi casa cuando enviudé...
Muy fino amigo:
Principio las líneas de esta misiva
para agradecerle su visita... recibimos
tan pocas!... pero en fin, no debo
quejarme, antes bien agradezco a Dios
por tantos y tantos años de vida que me
ha otorgado. Cumplí ya seis años en este
asilo donde por mi propia
voluntad me he confinado.
He conocido en esta larga estancia a
muchos viejos y muchas ancianitas y aunque
sabemos que nuestra estancia
en este mundo es ya corta,
eso no ha impedido que hayamos
llegado a estimarnos y extrañar
a los que se van yendo;
el día que hay una defunción... se
respira aquí un silencio impresionante.
Mi estancia en el mundo exterior era ya
insostenible; creo que fue un error el
haber invitado a mi hijo y su familia
a vivir en mi casa cuando enviudé...
Mensaje
Me gusta
No