REMEDIOS POPULARES CON ACEITE DE OLIVA (I):
Acción antifebrífuga: Para reducir la fiebre. Se somete a cocción 60 gr. de hojas secas de olivo durante un cuarto de hora. Se toman tres tazas del caldo al día. También se puede poner en maceración 60 gr. de corteza en 250 gr. de alcohol apto para uso alimentario, se deben tomar 20 gotas tres veces al día.
Laxante: En casos de estreñimiento se pueden tomar un par de cucharadas pequeñas de aceite de oliva crudo en ayunas.
Hemorroides: Para aliviarlas, se somete a cocción 30 gr. de corteza de olivo, por cada litro de agua. Con el agua que se obtiene de la cocción se lava la zona afectada.
Curar heridas, llagas o cualquier otra afección de la piel: Se somete a cocción 30 gr. de hojas secas de olivo por litro de agua. Con el agua que se obtiene se lava la zona afectada.
Cicatrizar heridas: Se mezcla aceite de oliva con vino negro y miel, todo a partes iguales, y la mezcla se extiende sobre la herida a cicatrizar. Se dice que esta mezcla es un cicatrizante maravilloso.
Cuidado de las uñas: Se coloca en un vaso un par de dedos de aceite de oliva y se sumergen las uñas en él, durante 5 minutos una vez al día antes de ir a dormir.
Estrías en las uñas: Se masajea con aceite de oliva las cutículas de las uñas antes de irse a dormir.
Aliviar el cansancio de los pies: Se añade unas gotas de aceite de oliva en la palma de la mano y se masajea los pies.
Tapones en el oído: El aceite de oliva es útil para reblandecer los tapones y facilitar así su posterior extracción. Se pone un par de gotas de aceite de oliva en el interior del oído y se tapa el oído con un algodón. Se deja actuar durante toda la noche, a la mañana siguiente se quita el algodón y se aplica agua caliente con una jeringuilla especial sin aguja.
Encías dolorosas: Para calmar el nerviosismo y el dolor que producen las encías cuando salen los dientes en los niños pequeños. Se realizan friegas en las encías con un poquito de aceite de oliva.
Rosácea: Para mejorar sus síntomas o retardar su aparición, se realizan de tres o cuatro minutos de masajes diarios con aceite de oliva.
Acción antifebrífuga: Para reducir la fiebre. Se somete a cocción 60 gr. de hojas secas de olivo durante un cuarto de hora. Se toman tres tazas del caldo al día. También se puede poner en maceración 60 gr. de corteza en 250 gr. de alcohol apto para uso alimentario, se deben tomar 20 gotas tres veces al día.
Laxante: En casos de estreñimiento se pueden tomar un par de cucharadas pequeñas de aceite de oliva crudo en ayunas.
Hemorroides: Para aliviarlas, se somete a cocción 30 gr. de corteza de olivo, por cada litro de agua. Con el agua que se obtiene de la cocción se lava la zona afectada.
Curar heridas, llagas o cualquier otra afección de la piel: Se somete a cocción 30 gr. de hojas secas de olivo por litro de agua. Con el agua que se obtiene se lava la zona afectada.
Cicatrizar heridas: Se mezcla aceite de oliva con vino negro y miel, todo a partes iguales, y la mezcla se extiende sobre la herida a cicatrizar. Se dice que esta mezcla es un cicatrizante maravilloso.
Cuidado de las uñas: Se coloca en un vaso un par de dedos de aceite de oliva y se sumergen las uñas en él, durante 5 minutos una vez al día antes de ir a dormir.
Estrías en las uñas: Se masajea con aceite de oliva las cutículas de las uñas antes de irse a dormir.
Aliviar el cansancio de los pies: Se añade unas gotas de aceite de oliva en la palma de la mano y se masajea los pies.
Tapones en el oído: El aceite de oliva es útil para reblandecer los tapones y facilitar así su posterior extracción. Se pone un par de gotas de aceite de oliva en el interior del oído y se tapa el oído con un algodón. Se deja actuar durante toda la noche, a la mañana siguiente se quita el algodón y se aplica agua caliente con una jeringuilla especial sin aguja.
Encías dolorosas: Para calmar el nerviosismo y el dolor que producen las encías cuando salen los dientes en los niños pequeños. Se realizan friegas en las encías con un poquito de aceite de oliva.
Rosácea: Para mejorar sus síntomas o retardar su aparición, se realizan de tres o cuatro minutos de masajes diarios con aceite de oliva.