¡Qué lindos son tus ojos como dos luceros que me iluminan por la noche, que me guian por el camino del bien y que me llaman locamente para amarlos! (Anónimo)
¡Qué morena! Tan hermosa como una rosa, de esa piel canela quisiera ser la avispa de tu colmena. (Anónimo)
¡Te voy a poner una multa!. ¿Por qué? Por exceso de belleza. (Anónimo)
¡Tienes un cuerpo que parece tallado a mano! (Anónimo)