Categoría: Poemas de Amistad
El canto del grillo.
Puedo escuchar los grillos esta noche,
su melodía incansable se extiende en armonía;
pero ninguno de ellos realmente me pertenece,
solo su música que llega a mis oidos.
De vez en cuando el canto de una ave nocturna
se interpone en el coloquial cantado,
suena como la rueda de una carreta cargada,
por algún buey jalando.
Su canto a veces se asemeja
al sonido del cascabel de la serpiente;
yo escucho mientras me froto las manos.
y así transcurre una noche más.
Fin.
Autor: Bernardo Arzate.
Mayo/26/2011
El canto del grillo.
Puedo escuchar los grillos esta noche,
su melodía incansable se extiende en armonía;
pero ninguno de ellos realmente me pertenece,
solo su música que llega a mis oidos.
De vez en cuando el canto de una ave nocturna
se interpone en el coloquial cantado,
suena como la rueda de una carreta cargada,
por algún buey jalando.
Su canto a veces se asemeja
al sonido del cascabel de la serpiente;
yo escucho mientras me froto las manos.
y así transcurre una noche más.
Fin.
Autor: Bernardo Arzate.
Mayo/26/2011