Todo hombre lleva a un niño en su interior. Y pobre del que no lo tenga.
La indiferencia quizas es el momento mas dañino dentro de la familia... finalmente los cuidados de una persona ajena a la familia no bastan y no por eso son despreciables aunque no evitan la muerte que nadie llora.
A veces al amor a un niño no es más que el propio gozo de vernos desde fuera amándole y gustarnos. Esa es su verdadera magia. Nos recuerdan lo que somos.
El beso son las palabras que muestran el amor.
Quiéreme cuando menos lo merezca, que será cuando más lo necesite.
La indiferencia quizas es el momento mas dañino dentro de la familia... finalmente los cuidados de una persona ajena a la familia no bastan y no por eso son despreciables aunque no evitan la muerte que nadie llora.
A veces al amor a un niño no es más que el propio gozo de vernos desde fuera amándole y gustarnos. Esa es su verdadera magia. Nos recuerdan lo que somos.
El beso son las palabras que muestran el amor.
Quiéreme cuando menos lo merezca, que será cuando más lo necesite.