Compramos energía a futuro

LA NUEZ DE ARRIBA: Aquella es la misma figura que se yergue en mis recuerdos,...

Yo misma me sorprendo, pero no es exagerar, la mujer es la más cercana colaboradora de Dios en la formación de las generaciones; porque es la mujer la que mece la cuna, la que alimenta y educa, la que produce hombres y mujeres para mañana.

Si ahora mi madre me preguntara de nuevo, y tú para qué quieres ser mujer?

Le respondería: deseo ser una verdadera mujer, para ser una bendición.

Y por fin, la vacación terminó, recuerdo que subimos al auto con nuestras bolsas de ropa y juguetes, me senté en el asiento trasero y miré hacia atrás, lentamente se perdió en la distancia la figura de aquella anciana dulce y sencilla que acarició mi frente de niña, y me llenó tantas veces de besos.

Aquella es la misma figura que se yergue en mis recuerdos, la de una madre abnegada y valiente que sacó adelante en medio de la pobreza a 18 hijos, la de una esposa fiel y cariñosa que atendió y cuidó a su marido hasta que los separó la muerte, la de una salvadoreña honrada y trabajadora que se tragaba sus sufrimientos y sonreía en todo momento, que sabía regalar con generosidad y compartir, que sabía consolar y guardar silencio.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Ella fue una verdadera mujer, cuyo nombre no está escrito en las enciclopedias ni en los libros de personajes famosos, pero está escrito en mi corazón y en la historia de tantas y tantas mujeres que en el mundo, son como ella, una roca sólida e inamovible, y una flor suave y perfumada.

VIOLETA MOLINA

El Salvador