GALANTEO BURGALES
De la Nuez, partió la mora,
De la Nuez, la bien guarnida.
Iba camino hacía Burgos,
Do madre y padre tenía.
Andada por el sendero,
Deambulada por la vía.
Acercase a un viejo roble,
Por esperar compañía.
Ve llegar a un figlio de algo,
Que de La Nuez ya salía.
La moza cuando él llegó,
De esta suerte le decía.
Si le place figlio de algo,
Lléveme en su compañía.
Pláceme, dijo, mozuela,
Pláceme, dijo, por vida.
Se descolgó del caballo,
Por hacerla cortesía.
Puso a la moza en las ancas,
Y subiéndose a la silla.
En el medio del sendero,
De afectos la requería.
La mora, disque le oyera,
Le apuntó con osadía.
Estate calmo caballero,
No hagáis tal villanía.
Soy filia de Sarraceno,
Del honor de morería.
El hombre que me tocase,
Despojos se volvería.
Por temor el figlio de algo,
Palabras no respondía,
Y en la vecindad de Burgos,
La mora ya sonreía.
¿De qué reís mí zagala?
¿De qué reís prenda mía?
Me rio de un caballero,
Y de su gran cobardía.
¡Tener zagala al ejido,
Y acatarla cortesía!
Con rubor el filio de algo,
Estas palabras decía…
¡Retornemos al sendero,
Que la tarea me hechiza!
La moza, cómo discreta,
Le dijo que no volvía.
Ni nadie aunque volviese,
Su cuerpo manosearía.
Soy la filia de un platero,
Sobrado en orfebrerías,
El hombre que me tocara,
La muerte le apremiaría.
La mora doncella es,
Y virgen se quedaría.
La Nuez de Arriba es,
De valor y autoridad.
Y por tener algo más,
A Burgos aman sus hijos.
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
De la Nuez, partió la mora,
De la Nuez, la bien guarnida.
Iba camino hacía Burgos,
Do madre y padre tenía.
Andada por el sendero,
Deambulada por la vía.
Acercase a un viejo roble,
Por esperar compañía.
Ve llegar a un figlio de algo,
Que de La Nuez ya salía.
La moza cuando él llegó,
De esta suerte le decía.
Si le place figlio de algo,
Lléveme en su compañía.
Pláceme, dijo, mozuela,
Pláceme, dijo, por vida.
Se descolgó del caballo,
Por hacerla cortesía.
Puso a la moza en las ancas,
Y subiéndose a la silla.
En el medio del sendero,
De afectos la requería.
La mora, disque le oyera,
Le apuntó con osadía.
Estate calmo caballero,
No hagáis tal villanía.
Soy filia de Sarraceno,
Del honor de morería.
El hombre que me tocase,
Despojos se volvería.
Por temor el figlio de algo,
Palabras no respondía,
Y en la vecindad de Burgos,
La mora ya sonreía.
¿De qué reís mí zagala?
¿De qué reís prenda mía?
Me rio de un caballero,
Y de su gran cobardía.
¡Tener zagala al ejido,
Y acatarla cortesía!
Con rubor el filio de algo,
Estas palabras decía…
¡Retornemos al sendero,
Que la tarea me hechiza!
La moza, cómo discreta,
Le dijo que no volvía.
Ni nadie aunque volviese,
Su cuerpo manosearía.
Soy la filia de un platero,
Sobrado en orfebrerías,
El hombre que me tocara,
La muerte le apremiaría.
La mora doncella es,
Y virgen se quedaría.
La Nuez de Arriba es,
De valor y autoridad.
Y por tener algo más,
A Burgos aman sus hijos.
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
