Es inevitable conocerte y no quererte, quererte y no amarte, amarte y no tenerte.
Si amarte mucho es anormal, entonces soy un fenómeno.
Los pájaros piden comida, los presos su libertad, y yo te pido amor mío que nunca me dejes de amar.
Amar y querer no es lo mismo, pues el que quiere exige más y el que ama lo entrega todo.
Quererte es conjugar el verbo amar en soledad.
A una chica guapísima vestida de color Amarillo. Adiós piolín aquí esta tu Silvestre.
Si el mar fuera leche y la arena arroz que rico arroz con leche comeríamos los dos.
Dame un vasito de amor para calmar la sed de amarte.
Si yo fuera chocolate y tu fueras maní formaríamos juntos un chocolate cry-cry.