LA NUEZ DE ARRIBA: A MILTON...

A MILTON

Sintiéndose en su hogar, advenedizo,
Como Dante, tal vez, en su Florencia,
Milton pierde y recobra el Paraíso.
Venciendo de sus ojos la impotencia.

Ese Milton leal republicano.
Ese Milton políglota y profeta.
Ese siervo de Dios, ese cristiano.
Ese Gran Dramaturgo, ese Poeta.

No ha querido la gloria de su nombre.
Lo demuestran las líneas que profesa:
“Enciérrase a la vez tanta vileza,

Matándose a un buen libro como a un Hombre”
Se ha llevado un dolor bajo la tierra,
No ver la libertad de su Inglaterra.