Parábola del sembrador
Yo, labrador, salí a sembrar el campo
una mañana de mi primavera,
cuando rompe la luz en alegrías,
las colinas verdean,
y el horizonte es línea
que uno intentara, como nueva cuerda,
añadir a la voz de esa guitarra
que en su recodo el corazón rasguea. ... (ver texto completo)
Yo, labrador, salí a sembrar el campo
una mañana de mi primavera,
cuando rompe la luz en alegrías,
las colinas verdean,
y el horizonte es línea
que uno intentara, como nueva cuerda,
añadir a la voz de esa guitarra
que en su recodo el corazón rasguea. ... (ver texto completo)
Lancé a voleo el grano,
esos deseos rojos en las venas,
la explosión contenida de los besos,
el alma rastreando cada grieta
de escapadas posibles,
la mente audaz, la voluntad sedienta.
Todo quebró sus puertas, sus amarras,
en busca de ancha, productiva tierra
esos deseos rojos en las venas,
la explosión contenida de los besos,
el alma rastreando cada grieta
de escapadas posibles,
la mente audaz, la voluntad sedienta.
Todo quebró sus puertas, sus amarras,
en busca de ancha, productiva tierra
