Adoro tu pelo, con olor a sal,
al viento flotando en total libertad.
Tu cuerpo sinuoso mojado de
mar,
tus huellas pequeñas, tus manos aladas,
que en la arena ardiente
quedan dibujadas....
cuando rauda, pasas,
como duende inquieto.....
queriendo a las olas
su espuma robar.
... (ver texto completo)