" ….Ella es clara y frágil, como los juncos verdes,
como los sauces grises, como los lirios glaucos.
Ella es un lucero en el azul lejano.
Y es alba y aura fría, sobre los pobres álamos,
que en las orillas tiemblan del río
humilde y manso.
Ella es un lucero en el azul lejano.
De su morena gracia, de su soñar lánguido,
de su mirar de sombra,
quiero llenar mi vaso.
Me embriagaré una noche de cielo negro y bajo,
a orillas del mar salado, para cantar junto a ella
una canción que deje cenizas en los labios..."
(Plagiando a Antonio Machado, "En las noches de verano de tu suspirar de fuego, quiero llenar mi vaso...")
como los sauces grises, como los lirios glaucos.
Ella es un lucero en el azul lejano.
Y es alba y aura fría, sobre los pobres álamos,
que en las orillas tiemblan del río
humilde y manso.
Ella es un lucero en el azul lejano.
De su morena gracia, de su soñar lánguido,
de su mirar de sombra,
quiero llenar mi vaso.
Me embriagaré una noche de cielo negro y bajo,
a orillas del mar salado, para cantar junto a ella
una canción que deje cenizas en los labios..."
(Plagiando a Antonio Machado, "En las noches de verano de tu suspirar de fuego, quiero llenar mi vaso...")
