Parece que el año sólo tiene un mes para disfrutar y soñar la vida.
En el periodo de vacaciones, se intenta hacer cosas nuevas como si quisieramos recuperar al otro yo que es: más atrevido, más jóven, más ligón, más optimista, más solidario. Se sonrie más, se parla más, se piensa menos, vestimos despreocupadamente mostrando la sensualidad de los cuerpos. ¿Será el calor del verano y la relajación de no tener el reloj en la mesilla.? ¿Acaso es ésta la forma de vivir que desearíamos hacer siempre y que no nos atrevemos a realizar?
Si no haces lo que te gusta. ¿Para qué vives? ¿Sólo en verano? O quizás cuando te jubiles cumplirás tus sueños? Un poco tarde.
Once meses de caras grises y un mes de payaso. Nuestras vidas.
En el periodo de vacaciones, se intenta hacer cosas nuevas como si quisieramos recuperar al otro yo que es: más atrevido, más jóven, más ligón, más optimista, más solidario. Se sonrie más, se parla más, se piensa menos, vestimos despreocupadamente mostrando la sensualidad de los cuerpos. ¿Será el calor del verano y la relajación de no tener el reloj en la mesilla.? ¿Acaso es ésta la forma de vivir que desearíamos hacer siempre y que no nos atrevemos a realizar?
Si no haces lo que te gusta. ¿Para qué vives? ¿Sólo en verano? O quizás cuando te jubiles cumplirás tus sueños? Un poco tarde.
Once meses de caras grises y un mes de payaso. Nuestras vidas.