LA PERLA DE LA
CATEDRAL
En el
retablo mayor de la
capilla de la Presentación se puede disfrutar de la obra pictórica más valiosa que podemos encontrar en la Catedral de
Burgos: la Sagrada
Familia, pintada por Sebastiano del Piombo, una obra maestra de la pintura renacentista.
Fechada en el primer tercio del s. XVI, está considerada como una de las mejores pinturas italianas de esa época conservadas en
España y durante algún tiempo fue atribuida a Miguel Ángel. Fue traída de Roma por el canónigo Gonzalo Díaz de Lerma, cuyo sepulcro preside la capilla.