Construida en 1221 en estilo
gótico, por el rey Fernando III y el Obispo Don Mauricio, ha sido declarada en 1984 Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Antiguamente
Plaza del
Mercado Menor, Plaza real, Plaza de la Constitución, Plaza de la República y Plaza de Jose antonio Primo de Rivera.
En el pasado recibió el nombre de Plaza del Mercado Menor. La actual
casa Consistorial se levanta sobre la antigua
Puerta de
Carretas, desde la que los regidores burgaleses presidían los actos públicos.
En 1784 inició las obras del nuevo
ayuntamiento de
Burgos, situado en el solar de la antigua Puerta de Carretas,
arco de la
muralla que comunicaba el
Paseo del Espolón con la Plaza del Mercado Menor. El diseño de González de Lara fue sometido a la aprobación y correcciones de la Real Academia de Bellas Artes de
San Fernando y de su director, el arquitecto Ventura Rodríguez. Se utilizó
piedra de Hontoria de la Cantera (piedra utilizada tradicionalmente en los grandes
edificios burgaleses, como su
catedral), consta de un primer cuerpo columnado, dos pisos con
balcones y dos
torres (la de la izquierda con
reloj). Las obras terminaron en 1791 y el 17 de julio de ese año se inauguró el
edificio: a partir de esa fecha el consistorio burgalés dejó de reunirse en el Arco de
Santa María para hacerlo en la nueva Casa Consistorial (denominación que aparece grabada en el friso inferior del edificio). Esta obra significó el inicio de la renovación urbana de esa parte del
caserío. En 1784, el industrial Antonio Tomé sufragó una
estatua de bronce del rey Carlos III que se colocó frente a la
fachada consistorial. El propio González de Lara fue el encargado de organizar la ceremonia de inauguración.
La primera sensación que nos invade al entrar en la Plaza Mayor es de libertad, al estar en un lugar muy amplio y diáfano, sin edificios. Caminar bajo los
soportales de las
casas -todas de un
color diferente-, observar las torres de la catedral ‘rozando’ el
cielo y sentarse en los bancos situados en el centro propician que sea un sitio perfecto para descansar tras pasear por el
casco antiguo de Burgos. Aunque en sus orígenes fue concebida como lugar de concentración para el mercado de la ciudad, hoy en día cumple las funciones de centro administrativo (integra el edificio del ayuntamiento) y como lugar de ocio y relajación.