LOS REYES MAGOS La fachada de la iglesia de Santa María, ARANDA DE DUERO
LOS REYES MAGOS DE ARANDA
La fachada de la iglesia de Santa María de Aranda de Duero es una de las joyas del arte gótico Isabelino español. Realizada entre 1500 y 1515, los principales artistas implicados en su ejecución fueron los burgaleses Simón de Colonia y su hijo Francisco.
Una de las escenas iconográficas más señaladas de este auténtico tapiz esculpido en piedra se localiza a la derecha —con respecto a la mirada de los espectadores— del tímpano que preside la portada. Se trata de la Epifanía, más conocida como la Adoración de los Reyes Magos.
La composición se centra en la imagen de la Virgen con el Niño. Este recibe en sus manos y abre el cofre con el oro del rey Melchor. Justo detrás se puede ver al rey Gaspar con el cofre que contiene el incienso. Un poco apartado, el rey Baltasar con el cofre de la mirra.
Sobre la Epifanía, que conserva buena parte de su policromía original, se descubre la representación de la Cabalgata de los Reyes Magos que se encuentran de forma providencial a las afueras de la amurallada ciudad de Jerusalén, en concreto junto a la colina del Gólgota.
Los Reyes Magos que todos los años llegan hasta Aranda de Duero para traer los regalos a los niños son los mismos que están esculpidos en la fachada de Santa María: con sus mismos ropajes, coronas reales y cofres con las ofrendas.
La fachada de la iglesia de Santa María de Aranda de Duero es una de las joyas del arte gótico Isabelino español. Realizada entre 1500 y 1515, los principales artistas implicados en su ejecución fueron los burgaleses Simón de Colonia y su hijo Francisco.
Una de las escenas iconográficas más señaladas de este auténtico tapiz esculpido en piedra se localiza a la derecha —con respecto a la mirada de los espectadores— del tímpano que preside la portada. Se trata de la Epifanía, más conocida como la Adoración de los Reyes Magos.
La composición se centra en la imagen de la Virgen con el Niño. Este recibe en sus manos y abre el cofre con el oro del rey Melchor. Justo detrás se puede ver al rey Gaspar con el cofre que contiene el incienso. Un poco apartado, el rey Baltasar con el cofre de la mirra.
Sobre la Epifanía, que conserva buena parte de su policromía original, se descubre la representación de la Cabalgata de los Reyes Magos que se encuentran de forma providencial a las afueras de la amurallada ciudad de Jerusalén, en concreto junto a la colina del Gólgota.
Los Reyes Magos que todos los años llegan hasta Aranda de Duero para traer los regalos a los niños son los mismos que están esculpidos en la fachada de Santa María: con sus mismos ropajes, coronas reales y cofres con las ofrendas.