Florecillas silvestres,
flores del campo,
que salpicáis la tierra
con vuestro encanto.
Poniendo colorido,
sobre la tierna hierba
de los sentidos.
Moradas y amarillas,
rojas y blancas,
añil y anaranjadas,
rosas y malvas,
lilas y azules:
un inmenso arcoiris,
del suelo fluye.
Etéreas mariposas
los pensamientos,
con sus alados pétalos
al son del viento.
Lirios del valle,
de pasión y pureza
vuestro linaje.
Al beso de la luz,
las capuchinas
se prenden en hogueras
que el aire aviva.
Todo flamea,
y hacia el cielo se alzan
llama y candela.
Rododendro y genciana,
lino y graciola,
la flor de la retama
y la amapola.
Dorado sol,
tiene la margarita
por corazón.
La humilde violeta,
tan delicada,
en su lecho de hojas
duerme arropada.
Y al despertarse…
un perfume sutil
viene a aromarte.
Florecillas del campo,
flores silvestres,
lírico cromatismo
trenzado en verde.
Flores bravías,
alfombrando la tierra
con su armonía
Carmen Aguirre
flores del campo,
que salpicáis la tierra
con vuestro encanto.
Poniendo colorido,
sobre la tierna hierba
de los sentidos.
Moradas y amarillas,
rojas y blancas,
añil y anaranjadas,
rosas y malvas,
lilas y azules:
un inmenso arcoiris,
del suelo fluye.
Etéreas mariposas
los pensamientos,
con sus alados pétalos
al son del viento.
Lirios del valle,
de pasión y pureza
vuestro linaje.
Al beso de la luz,
las capuchinas
se prenden en hogueras
que el aire aviva.
Todo flamea,
y hacia el cielo se alzan
llama y candela.
Rododendro y genciana,
lino y graciola,
la flor de la retama
y la amapola.
Dorado sol,
tiene la margarita
por corazón.
La humilde violeta,
tan delicada,
en su lecho de hojas
duerme arropada.
Y al despertarse…
un perfume sutil
viene a aromarte.
Florecillas del campo,
flores silvestres,
lírico cromatismo
trenzado en verde.
Flores bravías,
alfombrando la tierra
con su armonía
Carmen Aguirre