NARROS DEL CASTILLO: Dueño de mi vida...

Dueño de mi vida
vida de mi amor
ábreme la herida
de tu Corazón.
Tu eres la alegría
del que va a vivir
Tu eres el consuelo
del que va morir.
Tu abrasas el hielo
Tu endulzas la miel
Tu eres el consuelo
para el alma fiel.
Corazón divino
que dulzura das,
de tu Sangre el vino
de tu carne el pan.
Yo soy tu vasallo
tu serás mi juez
cuando a mi me juzguen;
compadécete.