Ya ni siquiera comienza con una mención de la anatomía,
el enfoque en realidad lo deja a uno con todo el rutilante
universo del cual sólo la cabeza ha sido arrancada.
Uno intenta encontrar, entre los dientes de una falacia obvia,
la forma, el color, el olor, para conocer el "sentir" de la cabeza
sin conocer la cabeza del todo. ¡Y la presa es escurridiza!
Si el estómago desaparece, se liberan mariposas & mientras
la cabeza rebosa de ideas que nadie ha visto? Igualmente,
el sonido de una cabeza golpeada con una esponja artificial o el sonido
de una cabeza pateada en la calle el Día de Anzac podría
ser el sonido de un millón de otras cosas pateadas o golpeadas.
La cabeza no deja huellas en el aire & la forma de una
ausencia desconcierta incluso a la metafísica. Pero el cuerpo se conecta
a la cabeza como una idea visible & así tiene sus usos, porque
¿qué sentimiento es despertado por La Victoria Alada de Samotracia
sino un punzante pesar por la cabeza perdida? Y más allá del cuerpo,
un paisaje no es sólo nuestro anhelo de ser un vidrio de ventana
sino una telaraña de pistas hacia su centro, la cabeza. Y aquí, como un día
en que se encuentra una peluca solitaria en un vasto basurero dedicado a zapatos,
la cabeza Simbolista aparece, una pintura llena de amor
por sí misma, una emoción inútil como espejos sin cabeza.
Este arte está al borde de lo sentimental. Se llama "Conversación de Almohada".
el enfoque en realidad lo deja a uno con todo el rutilante
universo del cual sólo la cabeza ha sido arrancada.
Uno intenta encontrar, entre los dientes de una falacia obvia,
la forma, el color, el olor, para conocer el "sentir" de la cabeza
sin conocer la cabeza del todo. ¡Y la presa es escurridiza!
Si el estómago desaparece, se liberan mariposas & mientras
la cabeza rebosa de ideas que nadie ha visto? Igualmente,
el sonido de una cabeza golpeada con una esponja artificial o el sonido
de una cabeza pateada en la calle el Día de Anzac podría
ser el sonido de un millón de otras cosas pateadas o golpeadas.
La cabeza no deja huellas en el aire & la forma de una
ausencia desconcierta incluso a la metafísica. Pero el cuerpo se conecta
a la cabeza como una idea visible & así tiene sus usos, porque
¿qué sentimiento es despertado por La Victoria Alada de Samotracia
sino un punzante pesar por la cabeza perdida? Y más allá del cuerpo,
un paisaje no es sólo nuestro anhelo de ser un vidrio de ventana
sino una telaraña de pistas hacia su centro, la cabeza. Y aquí, como un día
en que se encuentra una peluca solitaria en un vasto basurero dedicado a zapatos,
la cabeza Simbolista aparece, una pintura llena de amor
por sí misma, una emoción inútil como espejos sin cabeza.
Este arte está al borde de lo sentimental. Se llama "Conversación de Almohada".