Que tu vida no sea una vida estéril. -Sé útil. -Ilumina, con la luminaria de tu fe y de tu amor. Borra, con tu vida de apóstol, la
señal viscosa y sucia que dejaron los sembradores impuros del odio. -Y enciende todos los
caminos de la tierra con el fuego de
Cristo que llevas en el corazón.
Ojalá fuera tal tu compostura y tu conversación que todos pudieran decir al verte o al oírte hablar: éste lee la vida de Jesucristo.
Gravedad. -Deja esos meneos y carantoñas de mujerzuela o de chiquillo.
... (ver texto completo)