DÍA – 15 – 12 -1025:
LA CRUELDAD DE LOS NIÑOS:
En un pueblo pequeño de la Mancha vivía una familia, Ana, con sus tres hijos de edades comprendidas entre dos, cuatro, y seis años, al morir Pablo el marido de Ana, todo les va mal, ella no encuentra donde trabajar, los pocos ahorros que tenían se les agotan, y Ana cae enferma, Alfonso el mayor siempre soñó con estudiar, pero se da cuenta de que los pequeños no tienen nada para llevarse a la boca, y su madre apenas puede salir de casa, hasta ese momento Alfonso, siempre era el primero en llegar al colegio, esto cambia de la noche a la mañana, el niño se esfuerza para no faltar a sus clases sin conseguirlo, lo primero que hace es ir de casa en casa pidiendo para poder alimentar a su madre y hermanos, la segunda cosa que hace es ir por leña para que su familia no pase frio, lo último es ir al colegio, el primer día el maestro se extraña de que llegue tarde dejándolo pasar, pero esto se repite todos los días, no solo llega tarde si no que no presta atención a las explicaciones de las lecciones, incluso sé queda dormido, como esto se repite a diario le riñe a amenazándole de que si sigue así le expulsara porque al colegió se va a estudiar, no a dormir, ese comentario hace que los demás niños se reían de él llamándole dormilón, abucheándole, Alfonso promete que no volverá a pasar y que llegara puntual al colegio, cosa que no puede cumplir, Don Julián, el profesor no lo entiende puesto que Alfonso es un niño muy responsable, decide ir a ver a su madre para ver qué es lo que pasa, al entrar en esa casa entiende por lo que está pasando su alumno, sale decidido a buscarle, pero no da con él, regresando al cole, es entonces cuando al asomarse por la ventana lo ve que va cargado con un haz de leña, con dirección a su casa, pasando unos minutos Alfonso entra en el colegio pidiendo perdón al profe y rogándole que no lo expulse por llegar tarde otra vez el profesor lo pone delante de sus compañeros, los cuales se ríen de él Don Julián manda callar a los niños, pidiéndole perdón Alfonso, a los niños les dice que nunca hay que juzgar a nadie sin saber los motivos que tienen para hacer lo que hacen, desde ese momento Alfonso nunca falto a la clase, gracias a la recolecta que se hizo por el pueblo para sacar a su familia adelante.
ROSARIO FAJARDO BLANCO.
LA CRUELDAD DE LOS NIÑOS:
En un pueblo pequeño de la Mancha vivía una familia, Ana, con sus tres hijos de edades comprendidas entre dos, cuatro, y seis años, al morir Pablo el marido de Ana, todo les va mal, ella no encuentra donde trabajar, los pocos ahorros que tenían se les agotan, y Ana cae enferma, Alfonso el mayor siempre soñó con estudiar, pero se da cuenta de que los pequeños no tienen nada para llevarse a la boca, y su madre apenas puede salir de casa, hasta ese momento Alfonso, siempre era el primero en llegar al colegio, esto cambia de la noche a la mañana, el niño se esfuerza para no faltar a sus clases sin conseguirlo, lo primero que hace es ir de casa en casa pidiendo para poder alimentar a su madre y hermanos, la segunda cosa que hace es ir por leña para que su familia no pase frio, lo último es ir al colegio, el primer día el maestro se extraña de que llegue tarde dejándolo pasar, pero esto se repite todos los días, no solo llega tarde si no que no presta atención a las explicaciones de las lecciones, incluso sé queda dormido, como esto se repite a diario le riñe a amenazándole de que si sigue así le expulsara porque al colegió se va a estudiar, no a dormir, ese comentario hace que los demás niños se reían de él llamándole dormilón, abucheándole, Alfonso promete que no volverá a pasar y que llegara puntual al colegio, cosa que no puede cumplir, Don Julián, el profesor no lo entiende puesto que Alfonso es un niño muy responsable, decide ir a ver a su madre para ver qué es lo que pasa, al entrar en esa casa entiende por lo que está pasando su alumno, sale decidido a buscarle, pero no da con él, regresando al cole, es entonces cuando al asomarse por la ventana lo ve que va cargado con un haz de leña, con dirección a su casa, pasando unos minutos Alfonso entra en el colegio pidiendo perdón al profe y rogándole que no lo expulse por llegar tarde otra vez el profesor lo pone delante de sus compañeros, los cuales se ríen de él Don Julián manda callar a los niños, pidiéndole perdón Alfonso, a los niños les dice que nunca hay que juzgar a nadie sin saber los motivos que tienen para hacer lo que hacen, desde ese momento Alfonso nunca falto a la clase, gracias a la recolecta que se hizo por el pueblo para sacar a su familia adelante.
ROSARIO FAJARDO BLANCO.