Referente al artículo noº 22 del Perfil de ocaña "Carta a Correos"
Para ejercer un oficio loable, muy sr. Mio, hay que tener genio y clase, y aunque la primera faltare, pues no vamos a ser todos Cervantes, ni Quevedos, ni aún Umbrales, a un aficionado a la escritura se le ha de exigir un mínimo de clase. Quiero decir, que aunque la base de su artículo sea verdadera, pues está muy mal Correos en Ocaña, un periodista tiene la obligación de contrastar opiniones antes de escribir; como por ejemplo, pasar por la oficina de su pueblo, hablar con los responsables y decir que va a escribir un artículo de Correos, cosa que vd. No ha hecho, entonces se le diría que la dirección de la empresa ha separado el departamento de oficinas del de reparto y que en lugares relativamente grandes están nombrando Jefes de equipo y de Carteria para solucionar el problema, por diversos motivos estamos a la espera de que los nombren en Ocaña. Otro problema es que la empresa para evitar que los trabajadores contratados adquieran derechos, los rotan, cambian o despiden cada seis meses ¿Que pueden hacer contra eso los responsables de turno de la oficina? al margen de su nula autoridad en la sala de reparto, pues dar impresos de quejas, comunicar el retraso a Toledo y pedir a Dios que ningún trencilla y mal periodista se acuerde de los empleados de la oficina.
Lo sentimos por aquellas personas a las que les lleguen tarde las cartas, pero de verdad, y desde la oficina de Ocaña, podemos hacer tan poco.
Para ejercer un oficio loable, muy sr. Mio, hay que tener genio y clase, y aunque la primera faltare, pues no vamos a ser todos Cervantes, ni Quevedos, ni aún Umbrales, a un aficionado a la escritura se le ha de exigir un mínimo de clase. Quiero decir, que aunque la base de su artículo sea verdadera, pues está muy mal Correos en Ocaña, un periodista tiene la obligación de contrastar opiniones antes de escribir; como por ejemplo, pasar por la oficina de su pueblo, hablar con los responsables y decir que va a escribir un artículo de Correos, cosa que vd. No ha hecho, entonces se le diría que la dirección de la empresa ha separado el departamento de oficinas del de reparto y que en lugares relativamente grandes están nombrando Jefes de equipo y de Carteria para solucionar el problema, por diversos motivos estamos a la espera de que los nombren en Ocaña. Otro problema es que la empresa para evitar que los trabajadores contratados adquieran derechos, los rotan, cambian o despiden cada seis meses ¿Que pueden hacer contra eso los responsables de turno de la oficina? al margen de su nula autoridad en la sala de reparto, pues dar impresos de quejas, comunicar el retraso a Toledo y pedir a Dios que ningún trencilla y mal periodista se acuerde de los empleados de la oficina.
Lo sentimos por aquellas personas a las que les lleguen tarde las cartas, pero de verdad, y desde la oficina de Ocaña, podemos hacer tan poco.