EN RELACION CON LA VISITA DE PRESIDENTE DE GUINEA.
¿LE DIRA EL GOBIERNO QUE HAGA INFRAESTRUCTURAS HOSPITALARIAS Y CONTROLE LAS FUERZAS DE SEGURIDAD?
La vida de la cooperante Ana Isabel Sánchez Torralba, de 22 años, se interrumpió la noche del pasado martes 3 de julio cuando un militar disparó contra el autobús en el que viajaba en un control de carreteras de la región continental de Río Muni, en Guinea Ecuatorial. Las autoridades guineanas han asegurado que abrirán una investigación para esclarecer este «lamentable incidente» y que juzgarán al autor de los hechos. La joven, nacida en Ocaña (Toledo), acababa de aterrizar en la antigua colonia española en lo que iba a ser su primer viaje de ayuda humanitaria. Llegó hace unos días para trabajar durante mes y medio en una de las dos escuelas para mujeres y niñas que las misioneras escolapias tiene en el interior del país. Ana Isabel Sánchez Torralba acababa de concluir sus estudios universitarios en Trabajo Social y quería colaborar en el proyecto de las religiosas. Fuentes de la Asociación para la Solidaridad Democrática con Guinea Ecuatorial (Asodegue) explicaron que las misioneras tienen dos casas en la región continental de Río Muni, una en Bata y otra en Aconibe. Una de las voluntarias españolas fue a Bata, mientras que Ana Isabel y una compañera se dirigieron a Aconibe en un autobús público. Según el relato de los hechos facilitado por las autoridades guineanas, el autobús se topó con un control militar de carreteras a la altura del poblado de Mbon Ebok, cerca de Mongomo. Uno de los soldados se enfadó con el conductor del vehículo, alegando que no habían abierto para que él pasara. El militar perdió el control durante la discusión y fue a buscar su arma, momento en que el conductor aprovechó para arrancar el autobús en dirección a Mongomo. Poco después, el militar alcanzó el autobús, ya en la ciudad, y disparó contra su parte trasera, donde iban las chicas españolas. Ana Isabel resultó muerta y el disparo también alcanzó a un niño de cuatro o cinco años, según dijo a Efe Ismael Torralba, tío de la fallecida. La joven fue trasladada al hospital de Bata, donde un equipo de médicos cubanos intervino quirúrgicamente a la joven para intentar salvar su vida, según contó la cooperante testigo del ataque. Las autoridades guineanas han anunciado que iniciarán una investigación para esclarecer lo sucedido, que fue calificado de «lamentable incidente» por el ministro de Información guineano, Agustín Nzé Nfumu.
¿LE DIRA EL GOBIERNO QUE HAGA INFRAESTRUCTURAS HOSPITALARIAS Y CONTROLE LAS FUERZAS DE SEGURIDAD?
La vida de la cooperante Ana Isabel Sánchez Torralba, de 22 años, se interrumpió la noche del pasado martes 3 de julio cuando un militar disparó contra el autobús en el que viajaba en un control de carreteras de la región continental de Río Muni, en Guinea Ecuatorial. Las autoridades guineanas han asegurado que abrirán una investigación para esclarecer este «lamentable incidente» y que juzgarán al autor de los hechos. La joven, nacida en Ocaña (Toledo), acababa de aterrizar en la antigua colonia española en lo que iba a ser su primer viaje de ayuda humanitaria. Llegó hace unos días para trabajar durante mes y medio en una de las dos escuelas para mujeres y niñas que las misioneras escolapias tiene en el interior del país. Ana Isabel Sánchez Torralba acababa de concluir sus estudios universitarios en Trabajo Social y quería colaborar en el proyecto de las religiosas. Fuentes de la Asociación para la Solidaridad Democrática con Guinea Ecuatorial (Asodegue) explicaron que las misioneras tienen dos casas en la región continental de Río Muni, una en Bata y otra en Aconibe. Una de las voluntarias españolas fue a Bata, mientras que Ana Isabel y una compañera se dirigieron a Aconibe en un autobús público. Según el relato de los hechos facilitado por las autoridades guineanas, el autobús se topó con un control militar de carreteras a la altura del poblado de Mbon Ebok, cerca de Mongomo. Uno de los soldados se enfadó con el conductor del vehículo, alegando que no habían abierto para que él pasara. El militar perdió el control durante la discusión y fue a buscar su arma, momento en que el conductor aprovechó para arrancar el autobús en dirección a Mongomo. Poco después, el militar alcanzó el autobús, ya en la ciudad, y disparó contra su parte trasera, donde iban las chicas españolas. Ana Isabel resultó muerta y el disparo también alcanzó a un niño de cuatro o cinco años, según dijo a Efe Ismael Torralba, tío de la fallecida. La joven fue trasladada al hospital de Bata, donde un equipo de médicos cubanos intervino quirúrgicamente a la joven para intentar salvar su vida, según contó la cooperante testigo del ataque. Las autoridades guineanas han anunciado que iniciarán una investigación para esclarecer lo sucedido, que fue calificado de «lamentable incidente» por el ministro de Información guineano, Agustín Nzé Nfumu.