En el pueblo, y no hace falta nada mas que darse un paseo por el mismo, no hay logica ni deseo de hacer bien las cosas y es un desastre el desarrollo urbanístico. Calculo que un veinte por ciento del pueblo son solares.
Ahora he leído en uno de los periodicos locales que se va a empezar a elaborar un plan, pero debido a su complejidad tardará varios años en terminarse. Creo que sera, cuando ya hayan terminado de destrozarlo los constructores. (Por cierto la entrevista del encargado de PROAL en El Perfil nausabunda, mis condolencias al puritano Rubiales).
Sigo, las calles son estrechas, no puedes pasear a tu hijo si lo tienes, como son de doble dirección los atascos y los cabreos son habituales. Las alcantarillas apenas se han cambiado y las conducciones no pueden atender a las necesidades de un pueblo que pretende doblar el numero de sus habitantes. El centro se queda sin tiendas ni bares. Las calles son oscuras al levantarse edificios de tres y cuatro alturas, con el truco de elevar el sotano y ponerle “gorro” a la ultima planta... Podemos seguir pero basta con leer de vez estos correos y comprobar lo que piensa la gente. Menos mal que muchos pisos se compraron para especular y no para venir a vivir aquí, que si no ya no cabriamos. Esto es lo que hay y no hay mas, y que nadie se llame a engaño.
Ahora he leído en uno de los periodicos locales que se va a empezar a elaborar un plan, pero debido a su complejidad tardará varios años en terminarse. Creo que sera, cuando ya hayan terminado de destrozarlo los constructores. (Por cierto la entrevista del encargado de PROAL en El Perfil nausabunda, mis condolencias al puritano Rubiales).
Sigo, las calles son estrechas, no puedes pasear a tu hijo si lo tienes, como son de doble dirección los atascos y los cabreos son habituales. Las alcantarillas apenas se han cambiado y las conducciones no pueden atender a las necesidades de un pueblo que pretende doblar el numero de sus habitantes. El centro se queda sin tiendas ni bares. Las calles son oscuras al levantarse edificios de tres y cuatro alturas, con el truco de elevar el sotano y ponerle “gorro” a la ultima planta... Podemos seguir pero basta con leer de vez estos correos y comprobar lo que piensa la gente. Menos mal que muchos pisos se compraron para especular y no para venir a vivir aquí, que si no ya no cabriamos. Esto es lo que hay y no hay mas, y que nadie se llame a engaño.