Procedentes de dos
pueblos de diferente terreno unimos nuestro destino, en lo malo y en lo bueno. Nos vinimos a
Madrid de las tierras de
Toledo, para buscar un futuro a los hijos venideros. Siete años de noviazgo veinticinco de casados ¿de qué me conoces tú? ¿de qué te conozco acaso? Mujer de carácter fuerte casó con hombre cabal al cabo de tantos años siguen queriéndose igual. Hemos pasado de todo buenos ratos, malos ratos
fruto de nuestras pasadas dos extraordinarios vástagos. Han tenido una pareja
... (ver texto completo)