Situada a los pies de la
catedral y junto a la denominada
puerta del Perdón, fue construida en 1531. Contiene
bóveda de crucería de terceletes, decorada por Juan del
Río en 1622 con símbolos de la Inmaculada Concepción. El cabildo catedralicio la cedió en patronato en 1645 al capitán Pedro Fernández de Miñano y Contreras, gobernador de
Cádiz, caballero de la Orden de Santiago, capitán de la flota de la Plata al servicio de Felipe IV de
España, para destinarla a panteón familiar.