Llegaba el verano con la alegria de los familiares que pasaban sus vacaciones en el pueblo.

Y el medio más directo era a traves del servicio de transporte que Alfonso Hernández realizaba con su vehículo. Bien fuera en busca de las familias a Barcelona, Madrid, San Sebastian o al lugar que era solicitado. Una imagen de la familia numerosa Aramburu, procedente de Madrid, llegada con todo el equipaje en la baca del coche. Todo ha cambiado y a Alfonso+, nadie le ha olvidado, a finales del mes último mes de marzo, el Señor lo acogió en el lugar que a todos nos tiene reservado.

(1955)