Yo pasé mi infancia en Villalpardo, la gente no fue buena ni conmigo ni con mi familia, no tengo buen recuerdo de ese pueblo.
Hoy en día, ya en Valencia y trabajando no puedo olvidar lo mal que lo pasé y las lágrimas que derramé por esa gente que tanto daño hizo a mi familia.
No me gusta ir por Villalpardo, aún que rara vez voy porque todavía tengo allí a mis abuelos y sólo por ellos voy.
A toda la población de Villapardo quiero hacerles recordar que un día hicieron mucho daño a una familia.
Adoro las Hoces del Cabriel y las seguiré defendiendo con uñas y dientes toda mi vida, por mucho que os pese Villalpardo.
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No me gusta ir por Villalpardo, aún que rara vez voy porque todavía tengo allí a mis abuelos y sólo por ellos voy.
A toda la población de Villapardo quiero hacerles recordar que un día hicieron mucho daño a una familia.
Adoro las Hoces del Cabriel y las seguiré defendiendo con uñas y dientes toda mi vida, por mucho que os pese Villalpardo.
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